CHIAPAS. La Línea N, en el tramo correspondiente a Ciudad Hidalgo-Tapachula, no presenta avance alguno y podría retrasar aún más la puesta en marcha del ferrocarril en la frontera sur.
Apenas a inicios de abril, el gobierno de México informó que la rehabilitación del tren estaría lista para el segundo trimestre del 2026, en la interconexión que el ramal de Chiapas tendrá con el Istmo de Tehuantepec y el Tren Maya, sin embargo, se pudo constatar que en el perímetro de la carretera que lleva de la cabecera municipal de Suchiate hacia el ejido La Libertad, ni siquiera se ha comenzado con el montaje de la estructura por la que correrá el tren.
Contrario a lo que ocurre en Huixtla, donde la infraestructura lleva poco más del 60 por ciento, en Ciudad Hidalgo la red ferroviaria va a paso lento y sin avances.
En este punto fronterizo, sólo se observa maquinaria pesada en labores de emparejamiento de terreno para poder colocar la plancha que servirá de trayecto del ferrocarril.
Al menos cuatro retro excavadoras realizan tareas de remoción de tierra y escombros, para poder seguir con estudios y análisis de la manera en que serán colocados los durmientes y demás estructuras en este punto que correrá hasta Tapachula por más de 50 kilómetros.
También es visible que viejos vagones han sido removidos de la línea principal para poder realizar el aplanamiento del suelo por donde se tendrían que colocar los fierros de la red de tren.
En este punto, lugareños han denunciado la tala inmoderada de maderas preciosas que ha generado descontento, al argumentar los quejosos que no hubo consenso para tales obras de aniquilación de árboles.
A esto se suma la complejidad de la zona en cuanto a la mala calidad de los caminos y carreteras, por lo que pidieron que se dé mantenimiento a las vialidades ante la circulación constante de vehículos, tráileres y demás maquinaria que es utilizada en esta obra.