TABASCO. En las calles de Villahermosa, el peligro acecha a los peatones de una manera inesperada: registros de agua abiertos y sin protección. A diario, cientos de personas transitan por la ciudad, apresuradas, ya sea porque van al trabajo, porque tienen una cita importante, o simplemente porque desean llegar rápido a casa.

Sin embargo, la falta de infraestructura adecuada, y el descuido en el mantenimiento de las calles, han convertido la vía pública en una trampa para los transeúntes.

Los registros abiertos han proliferado en varios puntos de la ciudad, representando un riesgo significativo, especialmente para quienes caminan distraídos o con prisa.

Estos hoyos en el pavimento pueden provocar caídas graves, lesiones, e incluso situaciones de peligro mayor si alguien cae dentro de uno, sin poder salir fácilmente.

Uno de los casos más alarmantes se encuentra en la avenida Francisco I. Madero, esquina con Bastar Zozaya. En este punto, hay un enorme registro de agua sin tapa, el cual no sólo es profundo, sino que también está lleno de basura.

Lo anterior indica que, aunque el problema ha sido notado por los ciudadanos, las autoridades no han tomado medidas para resolverlo. La acumulación de desperdicios dentro del registro es una señal de abandono, lo que incrementa el riesgo de enfermedades y contaminación en la zona.

Los transeúntes que pasan por este sector deben rodear el peligroso hueco con extrema precaución, pero la estrechez del espacio para maniobrar hace que un solo paso en falso pueda derivar en un accidente grave. El peligro aumenta aún más en horas de la noche, cuando la visibilidad es reducida y el riesgo de caer se incrementa exponencialmente.

Otro punto crítico se localiza en la calle Miguel Lerdo de Tejada, en la colonia Centro. Allí, un registro de considerable tamaño obstruye gran parte del paso peatonal, complicando el tránsito de los habitantes.

La falta de señalización o de alguna advertencia por parte de las autoridades hace que los peatones deban confiar únicamente en su instinto y atención para evitar caer en estos peligrosos agujeros.

Estos no son casos aislados. A lo largo y ancho de Villahermosa, cientos de registros abiertos ponen en peligro la integridad de los ciudadanos. La falta de mantenimiento y la omisión de medidas preventivas por parte de las autoridades han convertido este problema en una amenaza constante para quienes caminan diariamente por la ciudad.