VERACRUZ. El padre, Joel Ireta Munguía, responsable de la pastoral indicó que durante este año han recibido en la casa del migrante alrededor de cinco mil 300 personas de diversas nacionalidades, especialmente de Centroamérica, de los cuales 400 han solicitado su estancia legal humanitaria y solo 5 han recibido respuestas.

Sin embargo, a lo que va del año 2023, la pastoral de la movilidad humana ha detectado al menos diez secuestros de migrantes, muchos de ellos fueron liberados tras el pago de su familia en Estados Unidos, sin embargo, el 50 por ciento de los extranjeros que pasan por el sur sufren algún tipo de violencia.

Dijo, “han encontrado violencia dentro de nuestro país asaltos, asaltos a mano armada, golpeados alguno que otro secuestro”.

Indicó, que al menos el 50 por ciento de ellos han llegado con algún evento de violencia, ya sea porque tienen que salir huyendo de su país por la inseguridad o han tenido algún evento durante su tránsito por México.

Detalló, que de los más de dos mil 500 casos de personas que han sufrido violencia, al menos 10 de ellos han sido secuestrados en territorio nacional y después fueron liberados, tras el pago de los rescates.

Añadió que los migrantes que transitan en la entidad, se han hospedado por unas horas o un día en la casa del Migrante en Coatzacoalcos.

Externó que el sur de Veracruz, es una zona por la que deben pasar en su trayecto por cumplir el sueño americano, sin embargo, el flujo migratorio ha disminuido en los últimos meses del año. Hasta el momento, no se han presentado casos de secuestros de familias de migrantes, como ya se ha detectado en el centro del país, aunque reconoció que estos delitos no son denunciados.

Ireta Munguía indicó que actualmente en la casa del migrante, al menos 400 extranjeros han pedido refugio para tener su estancia legal en el país, de los cuales 4 o 5 han logrado concluir el trámite, los otros permanecen varados en el sureste esperando la respuesta de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).

Refirió que el proceso administrativo que tiene esta dependencia federal es muy burocrático y pocos migrantes pueden legalizar su estancia en México.