Ciudad de México, 19 de septiembre de 2025 – En un operativo que rememoró las extradiciones de los criminales más notorios de México, Hernán “N”, exsecretario de Seguridad de Tabasco y presunto líder del grupo criminal “La Barredora”, arribó ayer a México a bordo de la aeronave Bombardier Challenger 605 de la Fiscalía General de la República (FGR). Este mismo jet ha sido el encargado de transportar a figuras de la talla de Joaquín “El Chapo” Guzmán y su hijo, Ovidio Guzmán “El Ratón”, en sus respectivos traslados.

Hernán “N”, alias, “El Abuelo” o “Comandante H”, fue expulsado de Paraguay la tarde del miércoles 17 de septiembre. Esta decisión destrabó un proceso legal de al menos 60 días de acuerdo a las leyes de esa nación, el recurso legal que utilizaron fue la figura de la expulsión luego de que México renunciara al trámite formal de extradición, y ambos gobiernos acordaran esta vía expedita.

El vuelo despegó del Aeropuerto Silvio Pettirossi de Asunción, realizó una escala en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá, Colombia, una parada que ha generado cuestionamientos en México -y reafirmado la incredulidad ciudadana de posibles complots-, antes de aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Tapachula, Chiapas. Finalmente, ayer jueves 18 de septiembre, a las 18:57 horas, la aeronave llegó al Aeropuerto Internacional Adolfo López Mateos, de Toluca, Estado de México.

A su arribo, agentes de la Agencia de Investigación Criminal de la FGR ejecutaron una orden de aprehensión contra Hernán “N” por los delitos de asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés.

El jet de las extradiciones de alto nivel

La aeronave utilizada para el traslado de Hernán “N”, con matrícula XB-NWD, es un jet Bombardier Challenger 605, una pieza clave en las operaciones de alto nivel de las autoridades mexicanas. Este mismo avión fue el que transportó a Ovidio Guzmán “El Ratón” en su extradición a Estados Unidos el 15 de septiembre de 2023, donde enfrenta cargos por tráfico de drogas y otros crímenes. Años antes, el 19 de enero de 2017, el mismo jet fue utilizado para extraditar a su padre, Joaquín “El Chapo” Guzmán, desde Ciudad Juárez, Chihuahua, hasta Nueva York, donde finalmente fue condenado a cadena perpetua.

Este modelo está diseñado para vuelos intercontinentales con capacidad para hasta 12 pasajeros, cuenta con una suite aviónica Rockwell Collins Pro Line 21 y ha sido el medio de transporte de otros personajes de alto perfil en la política y el crimen mexicano. Entre ellos destacan el exgobernador de Chihuahua, César Duarte, detenido en Miami, Estados Unidos; el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, arrestado en Madrid, España, al igual que Alonso Ancira, acusado por lavado de dinero en el caso Agronitrogenados. Todos ellos fueron trasladados a México en este jet de la FGR tras ser asegurados en el extranjero, consolidando la reputación de esta aeronave como el vehículo preferido para las extradiciones más importantes del país.