BUENOS AIRES, Argentina.— «El empleo militante, afuera», de esta manera, usando un eslogan que Javier Milei usó durante su campaña presidencial, el vocero del nuevo gobierno, Manuel Adorni, anunció el despido de siete mil trabajadores del estado, la mayoría contratados este año.
El decreto de cesantía, firmado por el presidente Javier Milei, aplica a los servidores públicos contratados desde el 1 de enero de 2023, quienes será dados de baja, sin opción a recontratación, a partir del Año Nuevo.
«Entendemos que el país no está para... nunca lo está, pero mucho menos en esta situación, de crudeza, de realidad cruda que estamos viviendo y que vamos a seguir viviendo en un tiempo los argentinos, en abonar salarios o tener gastos que no tengan detrás una real necesidad».
Adorni descartó que el nuevo gobierno de ultraderecha esté planeando despidos masivos. «Todo lo que sea empleo militante, empleo no estrictamente necesario, no veo por qué los argentinos deban seguir pagándolo en una situación critica como la que estamos».
Y afuera de la Casa Rosada, miles de trabajadores se juntaban de todas partes para protestar, tuvieron que caminar con sus pancartas y su enjundia por las aceras, por culpa del protocolo antipiquetes, impuesto por Patricia Burlich, pero que no impidió que la gente saliera de sus casas para protestar.
Juan Grabois, dirigente obrero, advirtió que el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), aprobado por Milei representa un ataque al Poder Ejecutivo. «Queremos que se respete la división de poderes. En Argentina, se está atentando contra las facultades del Congreso», alertó.
Miles de manifestantes llamaron a sus dirigentes a convocar a un paro nacional, mientras coreaban «la patria no se vende». Durante las protestas, Heber Ybañez, reportero de la cadena Telesur, fue golpeado por los antimotines, que le robaron un micrófono.
Durante el día, Milei ofreció su primera entrevista en la Casa Rosada, donde declaró estar dispuesto a convocar a un referéndum si el DNU no es aprobada. «Obviamente [llamaría a plebíscito]. Que me digan ¿por qué el Congreso se opone algo que le hace bien a la gente?», atajó.
Con respecto a las protestas, el presidente ultraderechista las descalificó por partidistas. «En 16 días de gobierno, tres marchas. ¿No pueden aceptar que perdieron?»
A pesar de ser época vacacional, las playas estaban vacías. Los hoteleros y prestadores de servicio reportaron un 45 de cancelaciones en las reservaciones de turistas. Aquí no hay manifestantes ni policías, pero el panorama era el mismo que en la capital, desolador.