Perú.- Los restos de una mujer de unos 5 mil años de antigüedad, que habría pertenecido a la élite de la civilización Caral, fueron recuperados por arqueólogos peruanos.
El hallazgo fue anunciado este jueves en la capital de Perú por David Palomino, director del equipo de especialistas a cargo del proyecto de investigación de una de las culturas más antiguas del mundo que se asentó en el norte del país.
El entierro fue hallado en la Huaca de los ídolos, en el marco de la exploración que desde 1996 realizan arqueólogos dirigidos por la peruana Ruth Shady.
"Lo que se ha mostrado corresponde a una mujer que al parecer tendría un alto estatus, sería una mujer de élite", dijo Palomino.
Los análisis bioantropológicos preliminares indican que los restos recuperados corresponden a una mujer de entre 20 y 35 años, de 1.50 metros de estatura y que portaba un tocado en la cabeza que representaría su alto estatus.
Palomino resaltó que los restos momificados han "preservado la piel, parte de las uñas, el cabello y el propio envoltorio".
El cuerpo estaba envuelto con varias capas de tejidos diversos y con "un manto de plumas de guacamayo", un ave de la Amazonia, describió.
Junto a la mujer se encontró un ajuar funerario de pequeños objetos, como un pico de tucán, un cuenco de piedra y una cesta de paja que se exhibieron durante una conferencia de prensa en la sede del Ministerio de Cultura en Lima.
El descubrimiento es especialmente importante porque demostraría que las mujeres tuvieron un papel destacado dentro de la cultura Caral, señaló Palomino.
Los vestigios fueron localizados en diciembre pasado en la antigua ciudad pesquera de Áspero, que por años funcionó como basurero, antes de ser declarada sitio arqueológico.
Palomino exhibió un video y fotografías de los restos bien conservados de la mujer, con parte del ajuar funerario.
Desarrollada entre los años 3 mil y mil 800 antes de Cristo, la civilización Caral es considerada la cultura madre de América. Está ubicada en el valle de Supe, a 182 kilómetros al norte de Lima y a unos 20 kilómetros del Océano Pacífico.
La zona arqueológica de Caral fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 2009.