CHIAPAS. La caravana migrante que pretendía salir en las primeras horas de este martes desde Tuxtla Gutiérrez, decidió esperar más días y reprogramar la caminata para el próximo 7 de noviembre, debido a situaciones de inseguridad que mantienen temerosos a los más de mil 500 extranjeros que se apuntaron para participar.
Se tenía programado que las caravanas partieran el mismo día que se llevarán a cabo la elección presidencial en Estados Unidos como una forma de protesta y para visibilizar la crisis migratoria que existe en la frontera sur de México.
Según el activista Luis García Villagrán, este lunes en horas de la tarde se reunieron para determinar que no existen las condiciones para caminar desde la capital del Estado hacia el municipio de Arriaga, donde habrían de reunirse con el otro contingente que sí camina desde Tapachula a las 6:00 horas.
“Hay temor de los migrantes porque en el grupo de WhatsApp donde estamos concentrados se han filtrado traficantes de personas que han comenzado a atemorizar a todos, entonces todavía no podemos salir y debemos organizarnos más”, señaló el defensor de derechos humanos.
Explicó que se lamenta que el grupo en el centro del Estado no pueda salir, justo el día que Estados Unidos elige nuevo presidente o presidenta, pero primero está la seguridad del grupo que arriesgarlo en el camino y en una ruta complicada hacia los límites con Oaxaca.
Los migrantes se habrían de concentrar desde esta noche de lunes y madrugada del martes en las inmediaciones del parque central de Tuxtla, con la finalidad de salir caminando hacia La Pochota y luego desplazarse por toda la carretera hacia Ocozocoautla. Después, lo harían hacia el municipio de Arriaga, donde otros tantos extranjeros ya esperan para unirse a los dos grupos.
Pese a esto, el promotor de la caravana dijo que de cualquier forma los contingentes se unirán en Arriaga para caminar todos en un mismo grupo hacia territorio oaxaqueño, donde intentarán escalar hacia la Ciudad de México.