CHIAPAS. Las políticas migratorias emprendidas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podrían tener un impacto devastador en la economía de Chiapas, una entidad que depende significativamente de las remesas y que ocupa el sexto lugar nacional en recepción de estos recursos.
De acuerdo con datos de economía de Chiapas, las remesas representan el 16 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del estado, un indicador que resalta su importancia para miles de familias y para la economía local. Sin embargo, con la intensificación de las deportaciones masivas y la reducción de oportunidades laborales para los migrantes en Estados Unidos, el panorama es poco alentador.
Hasta el cierre del tercer trimestre del 2024, Chiapas ocupó el sexto lugar a nivel nacional en la recepción de remesas —de acuerdo al Banco de México—, con 3 mil 103 millones de dólares, cifras que pueden dejar de percibirse, debido a las políticas implementadas por Donald Trump, presidente de los Estados Unidos.
Dentro de este panorama, Gilberto Ruiz Cáceres, especialistas en temas económicos, explicó que dicho monto representa el 16 por ciento del Producto Interno Bruto de Chiapas, por lo que en el escenario de deportaciones o reducciones de empleo para los migrantes chiapanecos, generará una afectación directa a la economía de la entidad, que posiblemente se note hasta en el mes de junio.
Ruiz Cáceres, indicó que, en el último trimestre de 2024, las cifras de remesas podrían aumentar hasta un 60 por ciento en comparación al trimestre anterior, esto, debido que los migrantes chiapanecos, ante un escenario de deportaciones, enviaron todo su dinero a territorio mexicano.
“Comenzaron a hacer envíos para tener de este lado de la frontera sus ahorros, ya no en Estados Unidos, porque en un escenario de deportación pueden tener ya un capital en territorio mexicano y en particular, en territorio chiapaneco”, expresó el economista.
La dependencia de las remesas hace evidente la vulnerabilidad económica de Chiapas ante las decisiones políticas y económicas de Estados Unidos. En este contexto, los expertos subrayan la importancia de generar alternativas locales que disminuyan esta dependencia y fortalezcan la economía estatal de manera sostenible.