TABASCO. Efraín Rodríguez León, asesor jurídico del Comité de Derechos Humanos de Tabasco (Codehutab), manifestó que la reforma al Código Penal del Estado tiene que estudiarse a fondo, pese a que ya fue aprobada, porque puede favorecer la corrupción e impunidad.
Tirar poncha llantas en las carreteras sí debe ser sancionado porque afecta el patrimonio de los tabasqueños, pero castigar la colocación de narcomantas sólo favorecería a los funcionarios que son denunciados por ser parte de la delincuencia organizada, advirtió.
Con la reforma al Código Penal del Estado, en Tabasco se impondrán castigos de dos a seis años de prisión y multas de 100 a 500 veces el valor diario de la unidad de medida y actualización a quien o quienes hagan difusión de mensajes con amenazas o busquen alterar el orden público, mediante mantas o cartulinas; delito que se perseguirá de oficio.
Las adecuaciones que este martes fueron aprobadas por el Congreso local, también consideran cárcel de uno a cinco años y multa de 100 a 500 veces el valor diario de la unidad de medida y actualización, a quien o quienes porten, fabriquen o amenacen con los llamados poncha llantas, así como con otros objetos que busquen hacer daño.
Rodríguez León se refirió a la tipificación de la colocación de narcomantas como delito grave, como una medida que “genera ruido”.
“En muchas ocasiones, en esas mantas, se denuncian a funcionarios de gobierno que son cómplices de personas involucradas en la actividad delincuencial (...) veo que lo que se está poniendo es una manera de censura, para evitar que ese tipo de funcionarios sean exhibidos”, alertó.
Consideró que la medida no favorece a los ciudadanos, sino más bien beneficia a esos malos servidores públicos que en esas mantas o cartulinas son denunciados como parte de la delincuencia.