Todos tenemos una razón para correr y una motivación que no surge de unos cuantos días, así resume Ángel Natanael la preparación y constancia que durante prácticamente todo el año tienen los jóvenes peregrinos que corren de punto a punto en México en honor a la Virgen de Guadalupe que este año cumple 492 años de su aparición en el cerro del Tepeyac según el testimonio que perdura desde esa época.

Mientras unos van otros vienen, Esmir de la Cruz Ramos de Chiapas y su contingente ya vienen de regreso de la Ciudad de México donde acudieron al recinto principal de veneración “La basílica de Guadalupe” este año se calculan que asistan 13.7 millones de personas un 12.1 por ciento más que en 2022.

Por las carreteras, en los caminos principales de todo el país, es común ver jóvenes, mujeres y hombres, corriendo con la antorcha algunos a pie, otros en bicicleta, pero siempre en grupos que se alientan mutuamente para cumplir la promesa que se hicieron para celebrarla este 12 de diciembre.

No es su nacimiento, es su aparición lo que festejan y sin embargo las tradicionales mañanitas acompañan a cada contingente que recibe la solidaridad de otros guadalupanos que en el camino les proveen lo que pueden, agua, alimentos y hasta mensajes de aliento reciben.

La derrama económica de la celebración religiosa se estima en mil 415 millones de pesos, todo un año de rifas, kermés, ahorros de millones de personas que a partir del 13 de diciembre, una vez culminado otro festejo guadalupano, se preparan para el siguiente año. Ya sea en la Basílica o en cualquier otro santuario del país.