CAMPECHE. A una sola garganta, el clamor de los empresarios de Ciudad del Carmen exige "que pague Pemex", ya que pese al compromiso de saldar parte de su deuda antes del 15 de diciembre, la petrolera nacional, no cumplió.

Más de 2 mil empresarios, trabajadores y sociedad civil, marcharon por la avenida Aviación, para "clausurar" simbólicamente las oficinas de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en la Isla.

Unidos llegaron al Santuario Mariano Diocesano de la Virgen del Carmen, a quien pidieron su bendición para evitar el cierre de más empresas y la pérdida de fuentes de empleo.

Encabezados por el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad del Carmen, Encarnación Cajún Úc, quien, en compañía del presidente del Centro Empresarial de Coparmex en Carmen, Alejandro Fuentes Alvarado, marcharon de la Glorieta del Camarón al Santuario Mariano Diocesano de la Virgen del Carmen.

La protesta, que tuvo lugar este viernes, fue una manifestación simbólica que exigía el pago inmediato de una millonaria deuda que ha afectado gravemente a la economía local, generando despidos y aumentando el desempleo en la región.

La clausura simbólica de las instalaciones de Pemex fue un acto de desesperación por parte de los empresarios.

La manifestación, aunque pacífica, dejó claro el mensaje: de no recibir una respuesta favorable, los empresarios no dudarán en analizar nuevas medidas para defender sus derechos e intereses, asegurando que, aunque no buscan confrontación, no permitirán que la injusticia persista.

Por su parte José Alejandro Fuentes Alvarado, empresario del sector energético, dijo que una tercera parte de los más de cuatro mil micros, pequeños y medianos empresarios no podrá cumplir con las prestaciones laborales; señaló que el impacto en la economía del municipio por el impago de PEMEX es serio y a estas alturas se han visto en la necesidad de vender activos o solicitar financiamientos con exorbitantes tasas de interés para no desamparar a sus colaboradores.

El también tesorero del Consejo Coordinador Empresarial de Ciudad del Carmen (CCEC), cuestionado sobre las posibles demandas laborales que podrían enfrentar las empresas por el incumplimiento en el pago de prestaciones laborales, significó el respaldo que muchos de los trabajadores han mostrado hacia las empresas locales. Sin embargo, como todo, comprenden que llega un momento en el que definitivamente no podrán retener a personas sin cubrir pagos, pues todos tienen necesidades, más cuando hay familia.

“Llegó el 20 de diciembre que tanto temíamos, una fecha fatal para los empresarios por la urgencia de cubrir las obligaciones que tenemos con los colaboradores. Si bien, algunos han cubierto las prestaciones, la mayoría han incumplido en no pagar las nóminas completas, otros no podrán pagar los aguinaldos. La falta de pago de PEMEX ha tenido un impacto en la economía local considerablemente serio”.

Fuentes Alvarado, señaló que durante todos estos meses, los empresarios han buscado mecanismos para mantener recursos no solo que permitan tener operatividad por los compromisos vigentes, sino también para no quebrar y hacer que desaparezcan las compañías que con mucho esfuerzo han desarrollado. Por lo que no se cuestionaban qué pasaría, sino cómo lo resolverían, y al menos en los últimos meses tuvieron que vender activos y pedir financiamientos, aunque las tasas de interés fueran muy elevadas, para cumplir con los trabajadores.

De acuerdo a un censo que en los últimos años se hizo, en Ciudad del Carmen había registradas unas cuatro mil 500 micros, pequeñas y medianas empresas. Si bien todas no tributan, es un número enorme y, en consecuencia, ese número se multiplica cuando se habla de capital humano. Por ello, sabían que llegar a este 20 de diciembre sin que PEMEX les pagara sería fatal para sus negocios.

El empresario dijo que al final los trabajadores están en su derecho de exigir sus pagos, pues han cumplido con sus funciones y, sobre todo, aguantado esas quincenas en las que se atrasaban o pagaban incompleto.

Sin embargo, de antemano muchos se han hermanado y dicen quedarse con los empresarios a luchar por sus fuentes de empleo. Desde siempre se habían mantenido los canales oficiales del diálogo con PEMEX, en donde muchas veces los recibió Octavio Romero.

Recurrieron al Gobierno del Estado y, con esta nueva administración, hicieron lo mismo de manera respetuosa. Aunque el director de PEMEX los recibió, se comprometió a pagar y tener atención especial, no cumplieron, lo que hoy los hace estar en esta compleja situación financiera.