CAMPECHE. La directora del Instituto Municipal de la Mujer de Carmen (Inmucar) Gladys Sofía Rivera López, dio a conocer un informe que, en el 2023, se registró un incremento del 10 por ciento en los casos de violencia de género contra la mujer, mientras que en total el año pasado se tuvo el registro de dos mil 134 casos, de los cuales el 28 por ciento, 597, fueron de hombres que buscaron apoyo psicológico y jurídico.

Dijo que la violencia contra la mujer es un problema social latente que va en incremento, a pesar de que este instituto ha estado realizando campañas de prevención para concientizar, ya que, si se compara la violencia que se registró el año pasado en el mes de enero, a la que se tuvo este año este, va al alza.

Para combatir la violencia de género contra la mujer y el hombre, pues el año pasado se registraron más de 500 casos en el Instituto Municipal de la Mujer, es necesario tomar valor y hacer la denuncia ante las autoridades, ya sea ante el Inmucar, donde se les da apoyo jurídico; la Vicefiscalía Regional de Justicia o el Centro de Justicia para la Mujer, “para darle seguimiento, porque después las carpetas quedan abiertas; entonces, le tienen que dar seguimiento”.

Rivera López afirmó que ya que no solamente las mujeres son violentadas en el seno familiar, ya que hay también casos en masculinos, pues el año pasado, de los dos mil 134 casos que se atendieron, 597 fueron hombres que llegaron a pedir ayuda.

Afirmó que en el 2023 en el Instituto Municipal de la Mujer se registraron dos mil 134 casos de violencia contra la mujer y el hombre, violencia física, psicológica, económica y sexual, son los principales, gestionados a través del Departamento de Atención Jurídica, además fueron dos mil casos los que se llevaron a los juzgados, y que también se enviaron de los juzgados familiares, en la mayoría de los casos, “estas son carpetas que tiene un juez para dictaminar sentencia o un fallo”.

En el instituto se apoya a las mujeres desde el empoderamiento, como lo es aprender un oficio para sustentar su casa, su hogar y a sus hijos para que tengan como llevar la comida a sus hogares, así como terapias psicológicas, que no solamente son para las mujeres violentadas, sino que también para los hijos que, a veces, indirectamente son afectados”, abundó.

Comentó que el pasado viernes se realizó una obra de teatro, un monólogo denominado “Gafas Violentas”, monólogos de una mujer violentada, en el que un grupo de mujeres escenificaron casos reales de violencia contra la mujer, “esto para concientizar a la sociedad desde la etapa estudiantil a la comunidad en general para que tengan claridad de este tema latente y preocupante”.