Tabasco.- El cultivo de maracuyá catapultó a Natividad de la Paz Reyes, pues aplicó sus conocimientos técnicos en la siembra de la fruta exótica, así como de la pitaya, en apenas un cuarto de hectárea; ya antes había trabajado con productores plataneros de Teapa, ahí fue cuando llegaron a sus manos folletos en los que se hablaba del maracuyá, un fruto que se daba en Brasil y Colombia. Al constatar que en Tabasco había uno similar inició a trabajar y desarrollar su propia técnica de cultivo.

¿El resultado? Su labor le dio la posibilidad de viajar a otro país, siendo invitada por la Universidad Estatal de Brasil, a un congreso internacional como la primera mexicana que sembraba maracuyá en México.

Esto sucedió a principios de 1990 y a la fecha, muchos han sido los altibajos para la tabasqueña ingeniera agrónoma egresada de la Universidad de Chiapas; hoy es experta en temas agrícolas, industriales y en procesos de producción que frente a los retos de los nuevos tiempos está cierta de que la agroindustria ya debe tener un enfoque sustentable. 

De la Paz Reyes ha tenido oportunidad de trabajar y visitar varios países donde, la gran diferencia con México es que el agrónomo es visto como una persona valiosa a quien el gobierno debe apoyar, al igual que a sus empresas. Ese ha sido su principal freno para despegar como empresaria, pues ha desarrollado los conocimientos, la experiencia y la técnica, pero le ha hecho falta capital de inversión.

“Si tú quieres pedir un crédito no se puede, las tasas de intereses son muy caras, pues no miden las variables”, lamentó.

Cuando empezó a innovar en la siembra de maracuyá pasó de tener un cuarto a 18 hectáreas de cultivo y establecer su planta. “Llegué a vender de forma regional en Sams, en Tabasco, en Mérida y Quintana Roo; donde tenía mayores compradores era en Mérida, llegó un momento en que realmente la carga se me hizo muy pesada”, relata en plática exclusiva para Sintexto.

También empezó a trabajar con el mucilago, que es un destilado del cacao. “Con el mucilago hicimos un destilado de cacao, encontramos un volumen de alcohol en el proceso de la segunda destilación de un 40%, es una bebida alcohólica, de buena calidad, de buen sabor”, explica. Para la producción de esta bebida desarrolló un prototipo que ayuda con el destilado, y que ya tiene patentado.

Después de ser proveedora de Sams empezó a desarrollar otras bebidas de frutas naturales de temporadas las cuales produce y comercializa hasta la fecha solo en el mercado local.

Natividad de la Paz Reyes hace una reflexión respecto a la importancia de que el empresario tenga los conocimientos en aspectos financieros o control político, pues después de sus tropiezos comprende que por no estar capacitada perdió toda su empresa en la devaluación de 1995.

Hoy en día Natividad produce a mediana escala y a la par trabaja con el empresario Eleazar Cabrera, propietario de Charricos elaborando alimento balanceado para pollos y cerdos y con materiales de la región; “a mí me toca balancear esas dietas”.

Frente a los retos, la agrónoma destaca las alternativas para la reutilización, el reciclaje y evitar contaminar la tierra, “lo que vamos a sufrir cuando lleguemos a contaminar el recurso hídrico, el agua va a ser veneno”.

Las nuevas generaciones tienen que estar cuidando esos recursos y la agroindustria tiene que venir con esa visión de ser sustentable, puntualizó.