CHIAPAS. El cónsul de Honduras en Tapachula, Elmer Misael Leiva Cortés, acusó que quienes lo increparon, corrieron e insultaron verbalmente no son de Honduras, ya que fueron identificados los dos hombres como originarios de El Salvador, mientras que la mujer agresiva es de nacionalidad cubana.
Dijo que se acercó a atender a los hondureños de la caravana y que en ningún momento salió corriendo, como lo están manejando los medios de comunicación de ese país centroamericano.
Señaló que él fue a darles una solución a los migrantes para regular su estancia en el país y puedan cruzar el territorio de México de manera legal, para que no se expongan las niñas y niños que acompañan a sus padres sin causa de comunicación.
“De lo que ocurrió yo no me quejo de los connacionales, sino de las personas de otras nacionalidades que me agredieron verbalmente, nunca de golpes o que yo haya salido corriendo del lugar. Al contrario, los hondureños me escucharon; sin embargo, había personas que los estaban guiando y eran los más agresivos”, expresó el diplomático.
Añadió que llegó hasta donde estaba la caravana, en la que iban, si mucho, 120 hondureños y no los tres mil que se manejó en los medios de ese país centroamericano, lo que tiene en foco de atención a Honduras por la malversación de la información.
Piden asilo
Por otra parte, la caravana migrante se reagrupa en Tapachula tras avanzar desde Suchiate y pide a los gobiernos mexicano y estadounidense implementar políticas de asilo que permitan su libre tránsito y estadía por ambos países.
Agotados tras la caminata a lo largo de más de 43 kilómetros, los inmigrantes descansaron este lunes en el parque Bicentenario de Tapachula, donde se organizaron para reiniciar su marcha hacia el municipio de Huixtla.
El contingente, integrado por guatemaltecos, salvadoreños, hondureños, venezolanos y colombianos, buscará avanzar hacia el centro del país, aunque ahora sin la presencia de un líder o activista que conduzca a la caravana por los pueblos del sur de Chiapas.
Este mismo lunes, organizaciones internacionales y la Secretaría de Salud estatal han proporcionado agua y servicios médicos a los extranjeros, que presentan cuadros de deshidratación por las condiciones en que viajan.
La presencia del Instituto Nacional de Migración (Inami), que se niega a otorgar los permisos de libre tránsito, ha sido nula y solo intenta disminuir el número de miembros de esta caravana con el discurso que les cumplirán sus peticiones a los inmigrantes si acceden a subir a los vehículos oficiales y ser trasladados a sedes migratorias.
La respuesta de los extranjeros ha sido un rotundo “no”, ya que dicen sentirse engañados por el historial que se tiene con movilizaciones migrantes anteriores.
La salida de esta caravana se da también en medio de la efervescencia política en Venezuela, que el próximo domingo realiza elecciones para la presidencia nacional, lo que ha provocado reacciones en los cientos de venezolanos que marchan en el contingente.
“Que ya salga Maduro y que no vaya a decir que ganó por mayoría porque la mayoría de los venezolanos estamos aquí, en México y fuera de nuestro país por las condiciones en que tiene al país”, afirmó María Mercedes, una ciudadana venezolana.
El discurso político de distintos países latinoamericanos y principalmente de Estados Unidos, en torno a frenar la migración irregular, ha dado mayor connotación a esta caravana, que desafía a los gobiernos opuestos a dichas movilizaciones.
La caravana migrante avanza está mañana del miércoles en el tramo carretero Tapachula - Huixtla, a la altura de Huehuetan.
Son aproximadamente 1200 personas de todas las edades de diversos países de Sudamérica principalmente.
Personal de Protección Civil brindan resguardo y atención a los Migrantes, en la Carretera Federal con destino a la frontera norte.