CHIAPAS. Ante la creciente ola de violencia y la confrontación de grupos armados de la delincuencia organizada que buscan controlar la zona fronteriza, provocando el desplazamiento forzado de familias y pobladores, habitantes de la Sierra Madre de Chiapas conformaron grupos de autodefensa.
Detallaron que tienen armas hechizas de calibre 16, 22, “nos decidimos armar trincheras para que los delincuentes del grupo MAIZ no entren en nuestros pueblos. Porque esos son extorsionadores y vienen tomando todo lo que se les atraviese”, dijo Pedro.
En los caminos de accesos construyeron barricadas que buscan frenar el avance del grupo delincuencial, presuntamente ligado al cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) que tiene sus centros de operaciones en el municipio de Frontera Comalapa.
Externaron que estos delincuentes pretenden ingresar a los poblados del Bejucal de Ocampo, Bella Vista, La Grandeza, El Porvenir, Siltepec y Honduras de la Sierra.
Los campesinos, solo cuentan con rifles viejos, pistolas hechizas, piedras, palos, motosierra y hasta sus resorteras.
Por su parte Juan, indicó que él se sumó a este grupo porque siembra sus hortalizas “y bajamos a vender a Comalapa, pero ya ni ahí podemos bajar, cuando baja uno a vender un metro cuadrado colocábamos nuestros costales de venta, ahí te cobraban de 200 a 250 pesos, nosotros sobrevivimos de lo que estamos vendiendo”.
El comerciante Gerónimo, comento que para pasar con las mercancías de abarrote en su camioneta les cobraban 1500 pesos, “vienen ingresando en la sierra, pero nosotros nos armamos de valor, tapando las carreteras”.
Denunciaron que muchas familias, huyeron de sus casas, dejando hasta sus tierras para refugiarse en pueblos vecinos y otros fueron asesinados por no pagar derecho de piso o negarse ser integrante del grupo MAIZ.