Inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Yucatán clausuraron temporalmente a la obra de la estatua de Poseidón, ubicada en el municipio de Progreso, debido a la falta de autorización de impacto ambiental por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La medida fue tomada después de que se constatara que la estructura se había instalado en espacios de agua marina, a 25 metros de la línea de costa, mar adentro de la playa conocida como el Playón.
La autoridad ambiental determinó que esta clausura es una medida de seguridad necesaria para proteger el entorno marino de posibles daños ambientales. La obra, que fue colocada por el Ayuntamiento de Progreso de Castro, se encuentra frente al Malecón Internacional de Progreso, en la colonia Centro del municipio de Progreso, Yucatán.
La Oficina de Representación de Protección Ambiental en Yucatán continuará con el procedimiento administrativo para determinar las acciones pertinentes que se deberán tomar a continuación. Este procedimiento incluirá la evaluación de los impactos ambientales potenciales de la estructura y la decisión sobre si la obra puede continuar o si se requieren medidas adicionales para mitigar cualquier daño al medio ambiente.
La clausura de la estatua de Poseidón resalta la importancia de contar con las autorizaciones ambientales necesarias antes de iniciar cualquier proyecto que pueda afectar el entorno natural. La Profepa reiteró su compromiso de vigilar el cumplimiento de la legislación ambiental para garantizar la protección de los ecosistemas y la biodiversidad en la región.
El Ayuntamiento de Progreso de Castro no ha emitido un comunicado oficial al respecto, pero se espera que colaboren con las autoridades ambientales para resolver esta situación. La comunidad local y los visitantes del Malecón Internacional de Progreso deberán esperar a que se concluya el procedimiento administrativo para conocer el futuro de la estatua de Poseidón.