CAMPECHE. El alcalde electo del municipio de Candelaria, Jaime Muñoz Morfín, manifestó que la principal demanda en el tema de salud es la carencia de médicos especialistas, tanto en la atención de enfermedades como en el manejo del equipo tecnológico moderno.
Reconoció que existen deficiencias que deben subsanarse y es un tema que desde su campaña política fue conociendo ante la exposición que hicieron los candelarenses y que le da seguimiento desde entonces.
Indicó que es un tema prioritario y que deben hacer las cosas bien, en este renglón por lo que es necesaria su atención y solución.
Precisó que el problema más grave que tienen es la carencia de médicos especialistas para la atención de la población ya que “desgraciadamente se abren plazas de otros lugares, de otros municipios, trabajan un año y se regresan”.
Reconoció que es un tema pendiente de solución ya que los médicos especialistas no permanecen en la comunidad por lo que mientras no tengan contratos no podrán conseguir que permanezcan en el municipio para proporcionar la atención médica especializada.
Aceptó que genera afectaciones ya que el traslado de los pacientes enfermos a hospitales de los municipios cercanos o de la ciudad capital por la lejanía puede ser nocivo para quién padece alguna afección o sufrió un accidente.
Señaló que además del médico especialista también carecen de personal especializado en el manejo de los equipos ya que se cuentan con los instrumentos, pero no con el personal capacitado para su uso.
En el rubro de la inversión también es necesario canalizar recursos para la infraestructura hospitalaria del municipio ya que se debe contar con clínicas y centros de salud con las condiciones adecuadas para que reciban su atención los candelarenses.
Manifestó su confianza de que se hagan realidad los proyectos del Gobierno Federal de otorgar atención médica a las comunidades más lejanas y que en esta zona municipal se cuente con la atención médica especializada que demandan los habitantes. Consideró que lo importante es que haya la capacidad para atender los casos más graves y que impactan en la salud o en la vida de los pobladores.