TABASCO. Luego de que el Obispo de Tabasco, Gerardo de Jesús Rojas López, informó que buscará a los candidatos a la gubernatura para sostener una reunión y firmar un acuerdo de paz y de civilidad, la candidato del PRI y PAN, Lorena Beaurregard de los Santos afirmó que está de acuerdo.
En un comunicado, la candidata común a la gubernatura “Fuerza y Corazón Por Tabasco” Lorena Beaurregard de los Santos, externó, “por convicción propia, me sumaré a todo aquel esfuerzo que realicen diversos sectores de la sociedad para impulsar que las próximas autoridades cambien la política de seguridad aplicada en este sexenio, que ha sido un rotundo fracaso al propiciar el incremento de la violencia y de la inseguridad en todo el país".
Las cifras oficiales indican que a pesar del compromiso presidencial de resolver este problema, se han registrado más de 182 mil homicidios violentos en lo que va de la administración; 100 mil personas se encuentran desaparecidas y muchas regiones, entre el 30 y el 40% del país según cálculos conservadores, se encuentran controladas por grupos del crimen organizado que imponen su ley sin que los gobiernos de Morena actúen para enfrentarlos, dejando a la población civil a merced de extorsiones, amenazas, golpizas, secuestros e incluso la muerte.
En Tabasco, este 2 de junio estamos a tiempo de cambiar esta política fallida de un gobierno que irresponsablemente ha renunciado a su obligación de aplicar la ley y en cuyas narices, grupos de la delincuencia organizada libran, desde octubre del año pasado, una guerra cruenta en la que han tomado nuestras calles y nuestras ciudades como campo de batalla.
En el caso de nuestro estado, los homicidios violentos van en aumento ante la inacción del gobierno estatal, que minimiza el problema como si los hechos de violencia fueran irremediables o parte de la normalidad. El pasado fin de semana se reportaron 11 asesinatos y este fin de semana se registran al menos cinco, entre ellos un feminicidio, con lo que van al menos 9 mujeres asesinadas en lo que va del año.
Somos mayoría quienes nos oponemos a que se normalice la inseguridad. Las familias no merecen estar encerradas en sus casas: merecen vivir en paz, con tranquilidad. Tenemos que restaurar la seguridad y hacer que la gente viva sin miedo. Bienvenida la iniciativa de la Iglesia Católica”, concluye el comunicado.