QUINTANA ROO. Para el colectivo ambientalista Sélvame del Tren, la declaratoria de área natural protegida de los terrenos de Calica, es una muestra de que han tenido razón en la vasta cantidad de recursos naturales que se han dañado con el Tren Maya.
El presidente Andrés Manuel López Obrador hizo la declaratoria oficial de Área Natural Protegida (ANP), del polígono "Felipe Carrillo Puerto", de más de 53 mil hectáreas, que abarcan porciones de los municipios de Solidaridad, Cozumel y Tulum, en Quintana Roo, e incluye dos mil 400 hectáreas propiedad de una subsidiaria de Vulcan Materials.
Guillermo DChristy, fundador del colectivo Sélvame del Tren, sostuvo que de esa manera se debió proteger la selva Maya por donde pasó la obra federal.
“Estos mismos argumentos que ponen para lograr esta área natural, son los mismos que ponemos para ir contra el proyecto presidencial del mal llamado Tren Maya”, expuso.
El activista comentó que previo a la declaratoria, el gobierno federal realizó una acción similar al que ejecutó Calica porque otorgó permisos de manera discrecional al Ejército para la extracción de material pétreo para la construcción de la vía del Tren Maya.
“Es una gran simulación porque después de haber vulnerado la reserva de la biósfera de Calakmul, el corredor natural más grande de México que va de Cancún, hasta Calakmul precisamente con la construcción de decenas de “calicas” para el consumo de material pétreo para el Tren Maya, cuando se han deforestado más de 10 millones de árboles”, dijo Guillermo DCristy.
El lunes por la noche se anunció en el Diario Oficial de la Federación el decreto de área de conservación de flora y fauna Felipe Carrillo Puerto, sobre una superficie de 53 mil 227 hectáreas, ubicadas en los municipios de Solidaridad, Tulum y la zona continental de Cozumel.
La nueva área de conservación incluye las más de dos mil hectáreas de Calica y el puerto de Punta Venado, concesionado por el Estado mexicano al particular.
El decreto frena cualquier posibilidad de que Calica continúe realizando labores extractivas de material pétreo para su envío a los Estados Unidos, actividad que realizó durante más de tres décadas al sur de Playa del Carmen.
Asimismo, pasan a formar parte del área de conservación un segmento del tramo 5 Sur del Tren Maya, el mismo donde los ambientalistas locales señalaron que el gobierno federal ejecutó trabajos que dañaron cuevas y cenotes con agua dulce.
“Ni modo que vamos a permitir que destruyan nuestro territorio. Además, buscamos con ellos llegar a un acuerdo, les ofrecimos que se les compraba su parte, se hizo un avalúo y siempre la prepotencia, no entendiendo de que México es un país independiente, soberano (…) No hay expropiación, es una declaratoria de área natural protegida, porque ni modo que no vamos a proteger nuestros recursos naturales”, destacó Andrés Manuel López Obrador.