Una alerta se desplegó luego de que se revelara que un gato que se encontraba en una fábrica de productos químicos en la ciudad de Fukuyama, Japón, se ha convertido en el centro de atención, al caer en una tina con cromo hexavalente, una sustancia altamente tóxica y cancerígena, lo que lo convirtió en radiactivo.
Las autoridades buscan con desesperación al mínimo porque la exposición causa daño a los riñones, el hígado, ulceras en la piel y cáncer.
El incidente ocurrió el pasado 12 de marzo, cuando el gato, de pelaje marrón, se encontraba en el patio de la fábrica. Según las cámaras de seguridad, el animal se subió a una reja y luego saltó a la tina, donde se encontraba el químico.