VERACRUZ. De acuerdo con autoridades de Caminos y Puentes Federales (Capufe), el 31 de enero de este año se abrirán dos carriles temporales para circular por la zona de Maltrata, Veracruz y será hasta mediados de este próximo año que se dé solución definitiva al derrumbe en el kilómetro 231 de la autopista Nogales-Puebla.
Por el momento, un promedio de 40 trabajadores mantiene labores de las 06:00 a las 20:00 horas en la zona conocida como “el Mirador”, a la altura de las Cumbres de Maltrata, para agilizar la apertura de esa vialidad tan importante para la conectividad del país.
Esta fase inicial incluye la construcción de un camino provisional de aproximadamente 500 metros de largo, con dos carriles y una velocidad máxima de 40 kilómetros por hora.
Gracias a esta obra, este camino permitirá reanudar el tránsito vehicular y el transporte de carga mientras continúan las labores de recuperación total de la autopista.
En ese sentido, cabe señalar que los trabajos realizados hasta ahora incluyen:
-Retiro de 126,954 metros cúbicos de material.
-Participación de más de 50 trabajadores.
-Uso de 12 excavadoras, 5 tractores, 2 camiones articulados tipo "Yucle", 3 brigadas de barrenación con explosivos, y una retroexcavadora.
El camino provisional estará equipado con medidas de seguridad y vigilancia, según la normatividad vigente. La SICT y CAPUFE serán responsables de garantizar la seguridad de los usuarios en esta etapa temporal.
Tras la apertura del paso provisional, comenzará la segunda etapa del proyecto, con una fecha estimada de conclusión para el 30 de abril de 2025. Esta fase contempla:
-Recuperación del trazo original de la autopista.
-Incremento de la velocidad de operación.
-Instalación de sistemas de contención mecánica para mayor seguridad.
El tramo afectado es una vía clave para el tránsito vehicular y de carga en la región. La apertura del paso provisional aliviará el flujo de vehículos mientras se completan las obras de recuperación definitiva.
Este esfuerzo conjunto entre la SICT y CAPUFE refleja el compromiso de garantizar una infraestructura segura y funcional para los usuarios, minimizando las afectaciones en el tránsito durante el proceso de rehabilitación.










